9 de noviembre de 2010

PATRICIA HIGHSMITH: EXTRAÑOS EN UN TREN


Sobre todo a través de la película de Alfred Hitchcock, aunque presente notables diferencias con la novela, ¿hay alguien que no conozca el argumento de Extraños en un tren?

Guy Haines es un joven y brillante arquitecto que se quiere divorciar de su esposa infiel, embarazada de uno de sus amantes, para casarse con otra mujer.

Durante un viaje en tren coincide con Charles Anthony Bruno, alcohólico y psicópata perteneciente a una adinerada familia. Bruno le propone a Haines un insólito intercambio criminal: él podría asesinar a su esposa si él se comprometiera a hacer lo mismo con su aborrecido padre. Se trataría del crimen perfecto, de dos asesinatos puros sin motivos personales que nunca podrían ser relacionados.

Guy Haines no le da más importancia al asunto hasta que semanas más tardes Bruno cumple su parte del disparatado plan. A partir de ese momento la confortable y prometedora existencia de Haines se transforma en una pesadilla. Bruno comienza a acosarlo y perseguirlo. Lo espera a la salida del trabajo, le llama por teléfono, se presenta en su casa, habla con su nueva mujer, le hace regalos...

Haines no encuentra otra salida que asesinar al padre de Bruno. “Mi equivocación fue contarle a un extraño mis asuntos particulares”, acaba reconociendo.

Extraños en un tren (1950) es la primera novela de Patricia Highsmith (Fort Worth, Texas, 19 de enero de 1921-Locarno, Suiza, 4 de febrero de 1995). La adaptación cinematográfica de Alfred Hitchcock, en cuyo guion colaboró otro genio, Raymond Chandler, lanzó al estrellato a la joven escritora.

En esta primera obra, Patricia Highsmith ya presenta algunas de sus constantes temáticas: la misoginia (Hay “esencialmente una sola clase de mujeres. Las que te ponen cuernos. En un extremo el adulterio, en el otro las putas”); la homosexualidad (latente entre los dos protagonistas masculinos); la presencia de personajes psicópatas y amorales; la teoría de que cualquiera puede llegar a asesinar (“Hay gente de toda clase capaz de asesinar.”) y, sobre todo, la indagación en los recovecos psicológicos de la culpa.

Sugerente. Imprescindible. 

Otras novelas de Patricia Highsmith:

1 comentario:

  1. Esta fue la tercera novela que leí de esta mujer y me impresionó muchísimo cómo era capaz de tenernos como gato escaldado. El crimen perfecto si se sabe mantener uno en su sitio que es lo que le pasa a Bruno. Yo también la tengo reseñada en mi blog, tendré que añadirle algunas mejoras en cuanto pueda.

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